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Petauro de azúcar: nueva moda en maltrato animal

Concienciación Barcelona, febrero 26, 2010

Petauro de azúcar: nueva moda en maltrato animal
Otra vez la raza humana se ha superado, sacando de su hábitat a otro ser al que no le han preguntado. En esta ocasión le ha tocado a los Petauros de azúcar.

PETAURUS BREVICEPS: LA ÚLTIMA MODA EN ANIMAL DE COMPAÑÍA Y NUEVO MALTRATO ANIMAL

Otra vez la raza humana se ha superado, sacando de su hábitat a otro ser al que no le han preguntado. En esta ocasión le ha tocado a los Petauros de azúcar. Es un pequeño mamífero nocturno de la familia de los marsupiales. En la naturaleza viven en grupos de unos diez ejemplares. Su vida transcurre en la copa de los árboles de donde también se alimentan. Insectos, miel y fruta son otros de sus manjares favoritos.

El problema para estos animales llega cuando alguien pone su punto de mira sobre ellos y ve que es un buen negocio el sacarlos de su hábitat y venderlos como si fueran artículos de moda.

A fundación FAADA llegó un caso de uno de estos peculiares animales. Fue abandonado en un piso por su anterior propietario. Por si esto no fuera poco el animal había sufrido la muerte de su madre y estaba deprimida

Las condiciones en las que encontramos a “Boleta”, así la hemos llamado, eran terribles. Desde que el propietario se marchó ya hacía unos meses, nadie le había limpiado su jaula. Únicamente se le daba de comer entre los restos de comida y excrementos acumulados en todo ese tiempo.

Nuestro departamento de fauna exótica se encargó del trámite burocrático, la atención veterinaria, la dieta específica y de la posterior Reubicación.

Mientras buscábamos ubicación para nuestro petaurus, nos llegó el aviso que hacía pocos días se había recogido otro ejemplar en Hospitalet, que seguramente se había escapado de su jaula, y estaba recogido en la protectora de esa población. Rápidamente nos pusimos en contacto con ellos y decidimos asociar a los dos para que tuvieran una vida más fácil.

De repente, nuestro primer petauro, mucho más pasivo que el otro, desarrolló una hinchazón un uno de sus ojos, síntoma de una fuerte infección en una de sus muelas, seguramente causada por la falta de higiene en la que vivía y el contacto de la comida con sus propios excrementos. La infección había pasado al hueso de la mandíbula y al ojo. Después de ingresarlo en la clínica y tras unas semanas de recuperación, se le tuvo que extirpar el ojo.

Al iniciar una búsqueda exhaustiva de información sobre los petaurus, nos dimos cuenta de lo complicado que es tener estos animales como mascotas. Lo primero que aprendimos es que son seres muy sociales y no pueden vivir solos. Se deprimen y llegan a morirse de tristeza. También descubrimos que es imposible reproducir la dieta que obtienen de la naturaleza, y la dificultad de adaptar una dieta en cautividad que cubra todas sus necesidades nutricionales. La mayoría, a la larga, terminan muriéndose por deficiencias nutricionales o por exceso de vitaminas, que no asimilan y dañan el hígado. Por último, los petaurus son mamíferos planeadores, que saltan distancias de 50 metros. Nadie, absolutamente nadie puede ofrecerles el espacio que necesitan.

Boleta y Lolo, a pesar de los problemas de Boleta, han tenido suerte. Todos los trabajadores y voluntarios de Fundación Faada nos hemos volcado en ellos para salvarles la vida y ofrecerles un hábitat adecuado a sus necesidades. Si la evolución de Boleta es buena, seguramente serán acogidos por la protectora APAN, que cuenta con una instalación fantástica.
Desde aquí queremos invitar a una reflexión. Esta especie, como todas las demás especies exóticas, tiene unas necesidades que ningún particular puede cubrir. Tenerlos en casa, en una pequeña jaula, es otra manera más de utilizar a los animales para nuestra satisfacción personal y también otra manera más de maltratarlos.