Utilizamos cookies propias y de terceros para ofrecerte una mejor experiencia y servicio. Si continúas navegando, estás aceptando nuestra política de cookies. Pero puedes cambiar la configuración en cualquier momento. Más información

Aceptar

Hazte socio/a

Barcelona inicia el control ético de palomas

Actualidad Barcelona, noviembre 28, 2016

Barcelona inicia el control ético de palomas
El uso de anticonceptivos permitirá reducir del 20% la población de palomas sólo en el primer año y hasta del 80% en 5 años.

El Ayuntamiento de Barcelona empezará el control de las palomas de la ciudad con anticonceptivos, método que sustituirá la captura y el sacrificio de estos animales.

La iniciativa ha sido presentada el pasado viernes en el marco de la Comisión Permanente del Consejo Municipal de Convivencia, Defensa y Protección Animal, de la que FAADA es parte.

El proyecto, que se ha ensayado en la ciudad italiana de Génova durante 8 años, prevé en primer lugar la realización de un censo de animales el próximo mes de febrero: a día de hoy se calcula que hay unas 85.000 palomas en Barcelona, pero es necesario contar con datos más precisos.  

Con este propósito y para evitar interferencias en los resultados, ya se ha suspendido la captura como método de control.

Tras la elaboración del censo, está previsto que en el mes de abril se coloquen 40 dispensadores de pienso anticonceptivo en los diferentes distritos de la ciudad. Esta medida permitirá llevar a cabo el primer análisis de los datos a finales de 2017 y, según se calcula, reducir del 20% la población de palomas sólo en el primer año y hasta del 80% en 5 años.

El tratamiento anticonceptivo se realizará con nicarbazina, que actúa primero en los ejemplares más jóvenes y progresivamente en los subdominantes y dominantes.

El Ayuntamiento ha indicado que se trata de un proceso que a medio plazo permitirá abandonar definitivamente el método de control basado en captura y sacrificio y manteniendo el mismo nivel de exigencia de la salud pública.

Desde FAADA aplaudimos esta decisión que, tal y como demuestran los estudios y ensayos en otras ciudades, es la solución más ética, eficaz y económicamente accesible para controlar las poblaciones de palomas.