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Ni te imaginas de lo que están hechas las gominolas

Conscienciació Barcelona, març 9, 2020

Ni te imaginas de lo que están hechas las gominolas
La gelatina, ese alimento que casi no tiene sabor ni olor, no es apto ni para veganos ni para vegetarianos.

Flanes, mermeladas, purés, sopas, aderezos para ensaladas, jaleas, snacks de frutas y, por encima de todo, gominolas.

Son solo algunos de los alimentos más insospechables que llevan ingredientes de origen animal en forma de… gelatina. Sí, porque aunque no resulte tan evidente a primera vista, la gelatina, ese alimento que casi no tiene sabor ni olor, no es apto ni para veganos ni para vegetarianos.

¿Y de qué está hecho? La gelatina se obtiene a través de la ebullición prolongada de huesos, cartílagos, articulaciones, pezuñas y pieles de cerdo, cabezas de pescado, cuernos, huesos y pezuñas de ganado: básicamente, todos los despojos de la industria cárnica.

¿Cómo se fabrica? Al no utilizarse en la cocina, las empresas de gelatina obtienen estos restos directamente de los mataderos. Las partes de animales son esterilizadas y hervidas a 140ºC. El colágeno (que es la base de la gelatina) se separa del resto de tejidos conectivos, y, según la especie, se puede tardar hasta semanas. La mezcla que se obtiene con este proceso es triturada y desecada hasta convertirse en un polvo blanco, al que se le puede agregar color, sabor, aroma, etc.

Según la GME (Gelatine Manufacturers of Europe) este proceso tiene 5 pasos: pre-tratamiento, extracción, purificación, endurecimiento y secado. La misma GME confirma que las materias primas utilizadas para hacer las gominolas son restos de cerdos, vacas y peces.

Además, el brillo de las gominolas se suele deber a la utilización de grasas animales e incluso a la cera de abeja. Otras chuces como las nubes por ejemplo, obtienen su textura gracias a proteínas de animales, a menudo extraídas de insectos.

Este proceso no es ningún secreto, de hecho las gominolas llevan produciéndose así desde el Siglo XV. Pero muchas personas lo desconocen y consumen este producto sin ser conscientes de que contienen productos animales ni de que hoy en día existen alternativas.

En los últimos años por suerte han salido al mercado chuches y golosinas aptas para veganos y que se producen con grasas vegetales como la pectina.

¿Algún ejemplo? La gominolas de IKEA, las de las marcas Frubite, Nature Soy, Sweet Switch, Skittles, Biona, Candy Kittens, Yum Earth no contienen ingredientes de origen animal y, poquito a poco, es cada vez más fácil encontrarlas en el mercado.

 

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