Son muchas las dudas sobre el embarazo y la enfermedad de la toxoplasmosis que se han generalizado desde la llegada de internet y gracias a numerosas fuentes de dudosa calidad. Desde FAADA queremos responder a las principales preguntas acerca de la toxoplasmosis cuando convivimos con un gato y despejar todas tus dudas.
La toxoplasmosis es una enfermedad causada por un parásito de la familia de los coccidios llamado Toxoplasma gondii. Puede vivir en las células de gran variedad de especies animales, como los cerdos, las ovejas, roedores, pájaros, los gatos o las personas. Tan sólo en el gato se reproduce de forma sexual y elimina, por lo tanto, los ooquistes (los huevos de donde salen los parásitos) desde el sistema digestivo. En el resto de especies, el parásito permanece en forma de quiste en la musculatura del individuo.
En personas sanas el parásito produce pocos efectos, similares a los de un resfriado, y tras la primera infección, queda inmunidad para toda la vida; es decir, que no se vuelve a padecer tal enfermedad como sucede con la varicela.
La mayoría de personas no saben si han tenido toxoplasmosis o no, en general se descubre cuando, con una analítica, se detectan los anticuerpos contra el Toxoplasma. Es el caso de las embarazadas, a las que se le realiza de forma rutinaria un análisis de sangre para determinar si hay anticuerpos o no. Es importante realizar esta prueba porque en mujeres embarazadas, el contacto con el parásito por vez primera puede provocar abortos y malformaciones en el feto (existe un 40% de probabilidad de que el parásito llegue al feto).
Si la prueba sale positiva quiere decir que ya has tenido contacto con el parásito y tu cuerpo tiene anticuerpos para combatirlo en caso de otro contacto, por lo tanto, no tienes que preocuparte más. En los últimos años, la prevalencia en personas en España está entre el 9 y el 22% (es decir, la mayoría de la población es negativa).
Si la prueba sale negativa, quiere decir que nunca has contactado con el parásito y, por lo tanto, si entraras en contacto con él durante el embarazo, especialmente en el primer y segundo trimestre, podría haber consecuencias para el feto. En este caso, debes tomar precauciones para evitar contagiarte. A pesar de lo que algunas personas creen, deshacerte de tu gato no es necesario en absoluto.
La primera causa de contagio de toxoplasmosis es el consumo de carne (30-63% de los casos de infección). La segunda causa más frecuente es por el contacto con tierra (6-17% de los casos).
El Toxoplasma gondii puede contraerse de tres maneras:
Para que los ooquistes sean infectivos deben estar esporulados. Esto sucede entre 24 horas y 5 días después de que un gato infectado y en período de eliminación defeque. El período de eliminación se da sólo en los gatos infectados por primera vez tras 3-10 días y dura 2-3 semanas.
Los gatos se contagian al consumir carne contaminada. Por esa razón, si quieres prevenir que tu gato contraiga el parásito, sería mejor no permitirle que cace ni ofrecerle carne cruda.
Para evitar la primera vía de contagio, se recomienda no consumir carne cruda y lavarse bien las manos si hubiera que manipularla.
Para evitar otra posible vía, hay que procurar no ingerir heces contaminadas. Para esto, debería lavarse bien cualquier producto procedente de la tierra, como las verduras, para eliminar restos de tierra que pudieran contener ooquistes.
Otra precaución importante es lavarse bien las manos después de haber estado tocando tierra por cualquier razón, como por ejemplo en tareas de jardinería o si acariciamos algún gato. Además, si la persona convive con gatos, deberían recogerse las heces a diario y desinfectar la bandeja, idealmente debería hacerlo otra de las personas de la casa que no esté embarazada.
Para que un gato pueda suponer un riesgo para el seguimiento normal del embarazo o el buen estado de salud del bebé deberían darse a la vez los siguientes factores:
Las medidas de las que tienes el control especialmente son la 5 y la 6. La prevención de estos factores es muy sencilla y constituye de hecho parte de un hábito saludable a aplicar por cualquier persona: lavarse las manos.
Es muchísimo más probable que se contagie por el consumo de carne (30-63% de los casos de infección se deben a esta vía). La segunda causa más frecuente es por el contacto con tierra (6-17% de los casos).
Un estudio realizado en distintos países de Europa determinó que el contacto con gatos no es un factor de riesgo para contraer la toxoplasmosis.
Otras fuentes
Guía de la Sociedad Española de Infectología Pediátrica para el diagnóstico y tratamiento de la toxoplasmosis congénita (Asociación Española de Pediatría)
Prevalencia e incidencia de la infección por Toxoplasma Gondii en mujeres en edad fértil (Revista Española de Salud Pública)
Sources of toxoplasma infection in pregnant women (A.J.C. Cook)