Dificultad: Baja
Tiempo de elaboración: 30 minutos
Ingredientes:
- 250 gramos de Frijol negro cocido
- 100 gramos de soja texturizada
- 1 tomate maduro pelado y troceado
- 1/2 calabacín
- 1/4 de puerro troceado en juliana
- 1 zanahoria pequeña cortada en dados pequeños
- 1 ramillete de cilantro
- 1 cucharada de jengibre rallado fresco
- Aceite de Oliva Virgen Extra AOVE
- 1/4 de vaso de agua
- Opcional pimienta de cayena
Elaboración:
Pondremos una olla con agua a calentar y herviremos la soja texturizada durante unos 3 minutos, para que se ablande y pierda un poco el sabor a cereal. Lo colaremos para quitarle un poco el agua y lo reservamos.
Por otro lado tomamos una sartén y echamos 1 par de cucharaditas de AOVE, cuando este caliente echaremos el jengibre rallado fresco, el puerro y la zanahoria, pasados unos minutos incorporaremos el calabacín y lo cocinaremos durante unos 10 minutos a fuego lento. Añadiremos la soja texturizada y seguiremos cocinándolo; pasados unos minutos incorporaremos los frijoles y el tomate maduro cortado a dados, echaremos el agua y lo dejaremos cocinando durante unos 10 minutos a fuego lento, removiendo de tanto. Pasado este tiempo, apagamos, tapamos y dejamos reposar. Luego ya estará listo para comer.
TIPS
- Los frijoles son una fuente abundante de nutrientes, incluyendo hidratos de carbono, proteínas, vitaminas, minerales y fibra dietética. Son bajos en grasa y no contienen colesterol. Al consumirlos aumentamos la fibra en nuestra dieta, este tipo de fibra es la que nos ayuda a reducir los niveles de colesterol en sangre, con lo que reduce el riesgo de enfermedades crónicas, tales como diabetes, obesidad y cáncer. Media taza de frijoles contiene 7 gramos de fibra. Además son una fuente vegetal de hierro mineral. Combinar los frijoles con comidas con alto contenido en vitamina C, como los tomates o los cítricos, ayuda a que nuestro organismo absorba el tipo de hierro que se encuentra en los frijoles.