Nuestra acción Lorca, mayo 18, 2021
Hace varios meses que desde FAADA estamos trabajando en el caso de una persona que albergaba cientos de animales en su casa, algunos de especies consideradas invasoras. Estos animales tenían una orden de sacrificio por su consideración de especies invasoras, pero tras las alegaciones por parte del propietario de los animales y nuestra solicitud oficial a la administración para poder realizar una gestión ética de los mismos, se nos concedió la posibilidad de reubicarlas en centros autorizados bajo ciertas condiciones.
Por esa razón, el pasado mes de febrero lanzamos esta petición pidiendo ayuda económica para poder llevar a cabo las actuaciones necesarias para la reubicación de los animales del caso. Como siempre, los seguidores y seguidoras de FAADA nos disteis vuestro apoyo y conseguimos recaudar la cantidad necesaria. Así que empezamos enseguida a preparar toda la documentación.
La semana pasada, el veterinario especialista en fauna exótica, Salvador Marín, llevó a cabo la captura, esterilización, identificación, vacunación y extracción de sangre de la mapache y 5 cotorras. Por desgracia, una de las cotorras falleció durante la intervención, ya que estos procedimientos siempre conllevan un riesgo.
Tras la recuperación de los animales, el veterinario y nuestro equipo los trasladamos hasta las instalaciones donde vivirán a partir de ahora: las cotorras en el centro de la Asociación Protectora de Animales Exóticos de Catalunya, y la mapache en el refugio El Cau del Bosc. Ambos centros cuentan con la autorización expresa de la Generalitat de Catalunya para albergar fauna invasora y, además, la administración nos hizo una documentación especial para aceptar a estos animales en concreto, por venir desde otra comunidad autónoma.
Ahora seguimos trabajando para llevar a cabo el traslado de los 6 cerdos vietnamitas y el medio centenar de aves domésticas que quedan en Lorca: contamos con daros más buenas noticias muy pronto.
Agradecemos a todos y cada una de vosotras la aportación que hicisteis para que estos animales puedan tener una buena vida a partir de ahora. Y enviamos un gran aplauso a Salvador Marín, al equipo con el que trabajó en la clínica Mutxamel, y al personal de los centros receptores que, a partir de ahora, se harán cargo con el máximo cariño de los animales rescatados. Entre todos y todas, ¡hemos evitado su sacrificio!
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