Nos personamos en el expediente sancionador contra los responsables de cerrar las cavidades de una casa en la que nidificaban vencejos reales

Cada año recibimos avisos de espacios de nidificación de especies protegidas, como los vencejos, que propietarios de inmuebles o comunidades, con una total falta de empatía y sensibilidad, deciden cerrar o destruir sin disponer de las autorizaciones necesarias.

En otras ocasiones, es la misma administración competente (ayuntamiento) que autoriza el permiso para las obras sin previamente comprobar que no haya afectaciones a fauna urbana protegida. Se dan incluso casos en los que aun sabiendo de su existencia, la administración no lo comunica al departamento de biodiversidad antes de otorgar la autorización.

Y esto es lo que sucedió el pasado lunes día 6 de mayo en el municipio de Masnou (Barcelona) donde se cerraron numerosas cavidades de una casa en la que nidificaba una colonia de vencejos reales.

Gracias al aviso de una vecina de la zona que aportó imágenes que mostraban las aves intentando entrar una y otra vez en los orificios donde se encontraban sus crías, desde FAADA informamos a los Agents Rurals y al Ayuntamiento para que urgentemente se procediera a la apertura de dichos espacios.

Una vez más vemos necesario recordar:

• Que las especies que suelen habitar en entorno urbano son la mayoría especies protegidas: vencejos, murciélagos, golondrinas, etc.
• Que hay especies que nidifican en los edificios, en orificios y tabiques pluviales, cavidades de ventilación, etc.

Que está prohibido por la normativa vigente:

• Retirar nidos (aunque no haya puesta), huevos, crías o adultos.
• Poner obstáculos al acceso del lugar de nidificación o refugio, como por ejemplo pinchos.
• Inhabilitar cavidades que estén siendo utilizadas como cobijo o para la cría.
• Dar muerte, dañar, molestar o inquietar intencionadamente los animales silvestres.
• Que la afectación grave o destrucción de nidos o refugios de especies protegidas estén o no ocupados, puede conllevar a una denuncia penal y/o un expediente sancionador administrativo.

Además, los ayuntamientos deben:

• Analizar, previa autorización o permiso, obras e intervenciones estructurales en edificios, para averiguar si hay presencia de especies protegidas y de espacios de nidificación, concentración, descanso o refugio. Sin importar que estén siendo o no utilizados en ese momento, ya que muchas especies protegidas son migratorias.
• Verificar en la página web Visor Nius del ICO si hay registrados nidos en ese emplazamiento, aunque el hecho de que no aparezcan allí no quiere decir que no hayan, sino que simplemente no han sido registrados aún.
• En caso de comprobar que efectivamente la obra va a afectar a especies protegidas, ponerlo en conocimiento de la administración competente antes de permitir ningún tipo de obra o actividad.

¿Y las empresas?

También las empresas que realizan este tipo de trabajo deben contar con profesionales informados de la normativa vigente, en lugar de intervenir cerrando espacios de cobijo de nidificación o incluso dejando animales en el interior con total impunidad.

¿Qué puedes hacer tú?

En caso de ser testigo de la destrucción de espacios de nidificación de especies protegidas o de ver animales encerrados, ¡toma imágenes y avisa inmediatamente a la administración competente y a entidades de protección animal o medioambiental!

En este caso agradecemos la rápida actuación de la vecina que nos contactó y de los Agents Rurals que se personaron en el lugar esa misma mañana, consiguiendo que se abrieran de nuevo las cavidades.

¡Desde FAADA vamos a comparecer en el expediente sancionador que se incoe a los responsables de los hechos!

 

 

 

 

 

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