Pedimos a Decathlon que deje de mantener crustáceos vivos hacinados en recipientes de plástico
Our action Barcelona, july 16, 2024
En las últimas semanas, hemos recibido imágenes de clientes y clientas de Decathlon que nos informaban que la empresa de complementos y ropa de deporte mantiene, en la sección de pesca de varios de sus establecimientos, a cangrejos vivos en pequeños envases de plástico.
Los animales, vendidos vivos como cebo para pescar, se encuentran en recipientes cerrados de plástico transparente, sin agua, totalmente hacinados, colocados en cualquier posición, careciendo de espacio para moverse y sin ningún tipo de ventilación ni acondicionamiento. Alguna persona nos ha explicado que cuando los dependientes/as de la tienda abren los recipientes para enseñar el “producto”, los animales intentan escaparse de manera frenética.
Hasta ahora hemos recibido imágenes de tiendas Decathlon ubicadas en dos municipios de Catalunya; además, hemos podido constatar que la empresa ofrece a la venta en su página web tanto cangrejos verdes como cangrejos violinistas.
Desde FAADA llevamos semanas intentando hablar con algún responsable de la empresa y enviando cartas a diferentes departamentos, pero, a día de hoy, no hemos recibido ninguna respuesta. En nuestros escritos, trasmitimos nuestra preocupación por el trato que se está dando a unos animales dotados de sensibilidad, y cuya capacidad para sentir dolor ya ha sido constatada científicamente.
La venta de crustáceos vivos conlleva un riesgo de manipulación deficiente, incluyendo su mantenimiento en espacios confinados, fuera del agua y a temperaturas inadecuadas. Un factor importante a tener en cuenta es el estrés que pueden llegar a sufrir las especies de crustáceos que son solitarias y territoriales. Colocar muchos individuos juntos en espacios reducidos –tal y como pasa en los recipientes de Decathlon–, es contrario a su naturaleza y perjudica gravemente su bienestar.
Además, estos animales en su medio natural pasan mucho tiempo bajo rocas o grietas, prefieren refugios oscuros y en estados de ansiedad evitan las áreas luminosas, algo que no tienen posibilidad de hacer si están recluidos en recipientes donde no pueden resguardarse de la luz.
Finalmente, aunque en España la venta de crustáceos vivos sea legal, mantener y vender seres vivos en estas condiciones debería implicar, como mínimo, un cuestionamiento ético.
¿Quieres hacer algo por ellos? Envíanos imágenes de tu Decathlon más cercano y pide a la empresa, a través de su formulario o por RRSS, ¡que deje de vender crustáceos vivos!
¡Ayudanos a seguir luchando por todas las especies!
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