Our action Girona, may 29, 2012
Fruto de la colaboración de nuevo entre FAADA y MONA, Coco y Bea llegaron el pasado 14 de mayo a la fundación MONA. El traslado tuvo lugar sin incidentes y ahora se están acostumbrando a su nueva vida.
Los primeros días han transcurrido llenos de novedades para ellas. Se están habituando a su instalación interior y a las jaulas en asociación, y en breve conocerán a los chimpancés que serán su nueva familia.
Bea se está adaptando perfectamente. Siempre está de muy buen humor y saluda con muchas vocalizaciones de alegría a cada nuevo cuidador que conoce. Coco es mucho más desconfiada y aunque todavía no nos ha dejado ver su personalidad, parece que es muy astuta. Hace solo unos días que ya se han podido reencontrar con su viejo conocido Tom, trasladado a MONA hace 1 año.
Un poco de historia
Coco tiene unos 20 años, seguramente nació en la selva, y su antiguo propietario la adquirió en una tienda cercana a las Ramblas de Barcelona. Bea tiene unos 30 años, no sabemos su origen, pero sí que fue adquirida junto con Tom, a través de un intermediario, a un circo.
Nuestras leyes aún permiten que coleccionistas privados, circos y adiestradores tengan legalmente animales en peligro de extinción, muchos de ellos potencialmente peligrosos y especies extremadamente sociales e inteligentes, como son los chimpancés.
El antiguo propietario de Bea, Coco y Tom es uno de los pocos casos ejemplarizantes. Después de más de un año de reuniones entre el propietario y expertos de FAADA en fauna salvaje, ha accedido a cederlos a MONA a pesar de poseer los permisos para tener legalmente a dos de estos animales en jaulas en el jardín de su casa. Además, se ha comprometido a ayudar a cubrir parte de los gastos anuales del mantenimiento de los chimpancés. A parte de estos 3 chimpancés, el pasado noviembre el propietario cedió a varios titis y mapaches que fueron trasladados por FAADA al Santuario AAP de Holanda.